Con un sentido acto en la plaza de la Democracia, la ciudad conmemoró el Día de la Restauración de la Democracia Argentina, cuando el 10 de diciembre de 1983 Raúl Alfonsín asumía la Presidencia de la Nación, dejando atrás el aciago tiempo de la dictadura cívico-militar iniciada el 24 de marzo de 1976.

La fecha fue establecida por la ley nacional 26.323 con el fin de promover los valores democráticos y destacar su significado político, histórico y social, cuando el pueblo argentino recuperaba el Estado de Derecho y la institucionalidad tras siete años.

Coincidente con el Día Internacional de los Derechos Humanos, el acto fue encabezado por el intendente Leonel Chiarella y participaron el presidente del Concejo, Juan Ignacio Pellegrini, funcionarios del Ejecutivo, ediles de distintos bloques, exfuncionarios y legisladores del periodo democrático, abanderados de Bomberos Voluntarios, dirigentes de entidades intermedias y medios de comunicación.

Un futuro con esperanza

Tras la entonación del Himno Nacional, las palabras alusivas estuvieron a cargo de la profesora de Historia, Cristina Milanesi de Crema, quien hizo referencia al contexto histórico que desencadenó el fin de la dictadura tras la derrota en la guerra de Malvinas y el posterior llamado a elecciones: “Es imposible recordar esta fecha sin evocar aquel discurso de Alfonsín ante una avenida 9 de Julio repleta de argentinos que veían el futuro con esperanza; aquel hombre reflejaba la garantía de consolidación democrática después de la noche más oscura que recuerde la historia argentina. Su figura representaba la vida y la paz y la garantía del regreso democrático”.

En otro párrafo, hizo referencia al clima electoral en la ciudad en aquellos años y concluyó diciendo que “la reconstrucción de la democracia comenzó hace 38 años y aún continúa, porque para su consolidación y profundización es necesario el aporte cotidiano de cada uno de los argentinos. Sigamos ese legado y recordemos el valor que tiene la democracia”.

Sostener valores

A renglón seguido, el intendente Chiarella afirmó que “como hijos de la democracia tenemos la enorme y hermosa responsabilidad de sostener valores, cumpliendo con la palabra, siendo honestos y trabajando en equipo. Hoy la ciudad nos plantea numerosos desafíos, pero el más importante es seguir priorizando los consensos. Hemos logrado avances con diálogo, sentido común y madurez política, y este camino es el mejor aporte y homenaje que podemos hacer para fortalecer la democracia”.

Tras evocar la figura de Alfonsín y su trascendente legado democrático, el mandatario venadense hizo entrega de un reconocimiento a dos de los intendentes que tuvo la ciudad desde la recuperación democrática: Roberto Scott y José Freyre (junto a Ernesto De Mattía), y se descubrió una obra alusiva a los 38 años de restauración de la democracia.

El cierre fue con la Marcha San Lorenzo y un número artístico de música y danza, con el dúo de Guillermo Mansilla y Jorge Bengolea interpretando “Libertango” y otras canciones, más el acompañamiento del bailarín Jonathan Casco Scozziero. La locución estuvo a cargo de Gustavo Brianza.