En la noche del Viernes Santo
Parroquia del Perpetuo Socorro
El Viernes Santo, en horas de la noche, se realizó el Vía Crucis viviente, en la plaza Juan Pablo II, sobre la explanada del ferrocarril, ante una gran cantidad de fieles que se acercaron para vivir la representación de la muerte y resurrección de Cristo. La organización estuvo a cargo de la parroquia del Perpetuo Socorro, que dirige el padre Gabriel Landesa, y se destacó una ambiciosa puesta en escena, donde no solo se realizó el tradicional relato bíblico, sino que además hubo interpretaciones a través de la danza y la música.
Pero lo más destacado fue el fuerte mensaje social que tuvo este Vía Crucis, donde se hizo una reivindicación de las mujeres, en el marco de las luchas que se están llevando adelante con consignas como “Ni una menos” para denunciar y repudiar los femicidios.
Desde la locución oficial del evento, se reivindicó a “mujeres liberadoras de una porción de la humanidad, reconociéndolas para que sus luchas no caigan en el olvido”. Pero además se habló de los más pobres y excluidos, y se bregó por “condiciones de trabajo digno para las mujeres”.
En escena hubo mujeres que representaron a las obreras muertas en una fábrica textil a principios del siglo XX, un 8 de marzo, dando origen a la celebración del Día Internacional de la Mujer; a la Madre Teresa de Calcuta; a Juana Azurduy, como “una mujer que supo luchar junto a su pueblo”; a Rosario Vera Peñaloza, como símbolo de la mujer educadora, e incluso se reivindicó a las Madres del Dolor, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, madres de víctimas del paco y Estrellas Amarillas. Allí, subieron mujeres de nuestra ciudad que están embanderadas en esas luchas, como la madre de Gastón Teglia, el joven asesinado hace unos años.
Colecta para inundados
Hubo una gran cantidad de actores de las distintas parroquias locales y no se escatimó en producción para que el relato sea más sentido entre los fieles presentes. Por eso hubo un caballo y una murga musicalizando distintos momentos, con fuerte acento en las representaciones a través de la música y la danza.
Tras el dolor en el momento de la crucifixión, se pasó a un clima festivo al momento de la resurrección, cerrando el Vía Crucis con murga y batucada, y el mensaje de que “varones y mujeres tengamos vida en abundancia”.
En el lugar se realizó una colecta, donde todo lo recaudado será destinado a través de Cáritas a los inundados de Comodoro Rivadavia, que intentan recuperarse tras el grave desastre hídrico.
Fuente: Diario El Informe
Foto: Representación en Viernes Santo