El Gobierno de Venado Tuerto decidió invertir en un recambio de los elementos reductores de velocidad en la ciudad, con el fin de mejorar la transitabilidad y evitar los problemas de drenaje pluvial que ocasionaban los tradicionales lomos de burro.

Al respecto, el subsecretario de Movilidad, Eugenio Bernabei, informó que “hemos tomado la iniciativa desde el año pasado de empezar a buscar una solución distinta en lo que se refiere a los materiales con que están elaborados los reductores de velocidad”.

En este marco, se comenzó a implementar un sistema de tachas de 40 centímetros, que “una de las ventajas que ofrece es el tema del escurrimiento. Por ejemplo habíamos colocado algunos de estos reductores en la zona céntrica y en las últimas lluvias hemos visto que funcionaron muy bien, mucho mejor que los actuales lomos de burro”.

Bernabei adelantó que, a partir de esta buena experiencia, se comenzará a hacer el reemplazo de los reductores, principalmente en la zona céntrica, “para agilizar los escurrimientos en días de lluvia”.

El funcionario detalló que se trata de elementos homologados por el INTI (Instituto Nacional de Tecnología Industrial), fabricados con material de ingeniería y que cuentan con un reflectivo para su mejor visibilidad de noche.

“En comparación con el lomo de burro o la cinta plástica, estos elementos son menos agresivos para los vehículos, en función que no produce un golpe seco, sino una oscilación. Además por su tamaño son más seguros para las bicicletas y motocicletas, porque tienen una separación y pasando a velocidad reducida es posible esquivarlos”, resumió Bernabei.